Low intake of vitamin B6 is associated with irritable bowel syndrome symptoms
Solveig C Ligaarden 1, Per G Farup
Nutr Res. 2011 May;31(5):356-61.
Pinchar Aquí:
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/21636013/
Resumen
La mayoría de los sujetos con Síndrome del Intestino Irritable (SII) experimentan una asociación entre los síntomas y el consumo de alimentos. Aunque la ingesta dietética ha sido el foco de investigaciones anteriores, la atención a nutrientes específicos ha sido escasa. Planteamos la hipótesis de que existe una asociación entre la gravedad de los síntomas del Síndrome del Intestino Irritable y la ingesta de grupos de alimentos específicos y nutrientes específicos. En este estudio transversal, se reclutó a 17 sujetos humanos con Síndrome del Intestino Irritable, según se define de acuerdo con los criterios de Roma II. Los síntomas del Síndrome del Intestino Irritable se registraron en tarjetas de diario todas las noches durante 7 días y se calculó una puntuación total de Síndrome del Intestino Irritable (rango, 0-15). La ingesta de alimentos se evaluó a partir de un diario de alimentos llevado por los sujetos en el mismo período. Se exploraron las asociaciones entre la puntuación total de Síndrome del Intestino Irritable y la ingesta dietética. La puntuación total diaria del Síndrome del Intestino Irritable fue de 6,43 (rango, 3,86 a 9,09). La ingesta de Vitamina B₆ fue el único componente de la dieta que se asoció significativamente con la puntuación total de Síndrome del Intestino Irritable. La mediana de la ingesta diaria de Vitamina B₆ fue de 0,9 mg / día (rango, 0,6-1,5), la ingesta diaria recomendada para hombres y mujeres es de 1,6 mg / día o más y 1,2 mg / día o más, respectivamente. Una puntuación alta de síntomas se asoció con una baja ingesta de Vitamina B₆ (R² ajustado = 0,583; β = -4,431; intervalo de confianza del 95%, -6,386 a -2,476; P = 0,0002). Una asociación inversa significativa entre la ingesta de Vitamina B₆ y la gravedad de los síntomas del Síndrome del Intestino Irritable podría tener implicaciones clínicas.
Fuente: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/21636013/